SÓLO SE PONE UNA VEZ

   

Si pudiera reflotar mi barco hundido
y aferrarme a una tabla de salvación
te daría todo el tiempo que has perdido
por robarle unos segundos al amor.

Con la fiebre de una risa contagiosa
sigo presa de esta grave enfermedad
soy la dueña de esta boca vanidosa
que derrama más mentira que verdad.

El estómago me está reconcomiendo
porque bebo y no me llego a emborrachar.
Tu mirada se ha caído más adentro
y más adentro sólo queda más verdad.

Mira, es mejor doblar la esquina
que no quiero más heridas
que acompañen la caída de este estúpido rodar.
Mira, es mejor si tú me olvidas,
mi verdad ya está servida,
sigue el rumbo de tu vida y no me vuelvas a buscar.

Con tu montón de palabras me hice un cuadro
y formas parte de mi extensa colección;
aunque quiera yo no sé dónde clavarlo
porque puede atravesarme el corazón.

Te prometo que el paisaje ha sido bello
y con pinceles de mi alma lo pinté.
Pero ya que está acabado he puesto el sello
y ese sello sólo se pone una vez.

Un recuerdo para ti, Perseo. 

 

Medusa-Gorgona

17/09/2003